¡ No te arrugues cuero viejo...!
La tambora ranchera de Los Altos de Jalisco y el sur de ZacatecasCONACULTA - INAH
Serie Testimonio Musical de México Vol 65
Juan Frajoza
*** ¡No te arrugues cuero viejo…! La tambora ranchera de los Altos de Jalisco y el sur de Zacatecas se presentó en la 38 Feria Internacional del Libro del Palacio de Minería
*** El historiador Juan Frajoza realizó la investigación que acompaña al disco, en la que aborda el origen del citado instrumento y su influencia en la región Caxcana
Más allá de la tradición del mariachi que predomina en Jalisco, el estado cuenta con una gran riqueza musical, ejemplo de ello es la tambora ranchera que, a contracorriente de lo que algunos investigadores sostienen, dicho instrumento no ha muerto, al contrario, está más vivo que nunca en las festividades religiosas y privadas de la región de la Caxcana, que incluye el sur de Zacatecas.
A este instrumento, cuyos origines se remontan a la época virreinal, está dedicado el fonograma ¡No te arrugues cuero viejo…! La tambora ranchera de los Altos de Jalisco y el sur de Zacatecas, volumen número 65 de la serie Testimonio Musical de México, presentado en la 38 Feria Internacional del Libro del Palacio de Minería (FILPM), como parte de las actividades editoriales del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Tambora de los Garza. Cuquío, Jalisco |
Durante la presentación realizada en el Auditorio Filomeno Mata, el historiador Juan Frajoza, autor de la investigación que conformó el disco-libro, relató que sus inicios en el estudio de la música de tambora y del canto cuamilero —canto llano de los rancheros que cultivan en la zonas ásperas, pedregosas—, surgieron gracias a don Antonio López Gómez, un intérprete de este género, con quien charlaba sobre la música que se hacía antes en la Caxcana.
Oriundo de Yahualica de González Gallo (Jalisco) e hijo de comerciantes, durante su niñez el investigador acompañaba de un rancho a otro a sus padres en la venta de sus productos, siendo testigo del sonido de la música en las fiestas religiosas de diversas comunidades, de la cual la tambora era parte importante.
La grabación está integrada por 24 piezas representativas, tanto de los géneros seculares como religiosos: corridos, canciones, jarabes, valses tristes, chotis, papaquis, el alabado y otras piezas; está acompañado por la investigación del autor, vertida en un libro que explica la historia de la Caxcana —región minera de arquitectura colonial en el que habitaron los tecuexes, antiguo pueblo indígena aguerrido— a través de la música.
Antiguamente el conocimiento musical se transmitía por escoletas (bandas de músicos aficionados); sin embargo, la migración ha provocado que muchos de los nativos de esa zona adquieran otros gustos musicales, por lo que al volver a sus comunidades ven a estas melodías como “viejas”, sin una función social como la que tuvieron en épocas pasadas, relacionadas con las actividades agrícolas y ganaderas o con las festividades.
Muchos tamboreros ya fallecieron y no grabaron; se estima que a partir de la década de los 90 del siglo pasado dejaron de transmitir sus conocimientos.
Antiguamente el conocimiento musical se transmitía por escoletas (bandas de músicos aficionados); sin embargo, la migración ha provocado que muchos de los nativos de esa zona adquieran otros gustos musicales, por lo que al volver a sus comunidades ven a estas melodías como “viejas”, sin una función social como la que tuvieron en épocas pasadas, relacionadas con las actividades agrícolas y ganaderas o con las festividades.
Muchos tamboreros ya fallecieron y no grabaron; se estima que a partir de la década de los 90 del siglo pasado dejaron de transmitir sus conocimientos.
En la investigación indagó tanto en los registros comunitarios como municipales. “Después de comenzar a hacer entrevistas en forma, y partir del aporte de don Antonio López, descubrí que podía localizar información sobre músicos decimonónicos en los archivos judiciales, ya que él (don Antonio) siempre hablaba de que en tal fiesta habían matado a tal persona, además de enterarnos de qué festividad era y sus detalles, entre ellos, la música”.
Juan Frajoza explicó que las tamboras rancheras no todas se instrumentan igual. Puede ser reemplazada por el tololoche que cumple la misma función, mientras que en la cuestión melódica, casi siempre el violín es el principal; también se le puede dotar de acordeón y armónica; en lo armónico se recurre a la guitarra o vihuela, aunque cada comunidad tiene sus particularidades, por ejemplo, en la tambora de San Antonio de los Vázquez y de Ixcatán, se recurría a un tambor redoblante.
La grabación consigna piezas como El pájaro perico, un son que se toca en Ixcatán, municipio de Zapopan, el día de San Pablo y San Pedro, durante la carrera “gallos a caballo”, cuando dos corredores con plumíferos en mano, se agarran de la fajilla o cinto y tratan de tirarse el uno al otro. Acto que forma parte de la tradición de petición de lluvia.
Tambora de Juchitlán. Cuquío, Jalisco |
El historiador Rafael Ruiz Torres destacó que Juan Frajoza es alguien que no sólo conoce la música de la zona, sino también la cultura e historia, lo cual es requisito indispensable para entender mejor la tradición musical.
“La música popular campesina es parte de un todo complejo que incluye baile, adornos y vestuario, que se ejecutan en alguna festividad secular o religiosa; no solamente es la música sino toda la fiesta y sólo así se puede comprender”.
El historiador egresado de la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH) resaltó como dato importante las diferencias que existían en cada uno de los ranchos, pues en algunos se permitía lo que en otros se prohibía. “Pensar que toda la música campesina se interpretaba de una sola manera es erróneo, las tradiciones no son para nada homogéneas, sino variadas y no pocas veces contradictorias”, expuso.
J. Jesus Escobedo Vizcaíno Yahualica Jalisco |
El repertorio que se tocaba en la región tenía elementos en común y otros en particular, los que Ruiz Torres ha apreciado en los grupos de música de cuerdas eran polkas, valses, mazurcas, chotis, y hay otros que son específicos para el caso de la tambora de los Altos de Jalisco y el sur de Zacatecas, como la canción cuamilera y los papaquis (música y baile propios de la fiesta rural de carnestolendas, que se acompaña con ciertos juegos en los que se usan cascarones de huevo pintado con los que se agreden simbólicamente los participantes).
Otro acierto de la obra, de acuerdo con Rafael Ruiz, es que devela algunas tradiciones que perduraron hasta el siglo XIX y que fueron comunes en la Colonia, muchas de las cuales se desconocían o están a puntos de perderse, como los “gallos a caballo”, o el “coloquio de pastores”, suerte de pastorela donde, al igual que en la carrera equina, se describe qué participación tenía la música en dichas actividades.
Yahualica, Jalisco. México |
Las gracias a Infinito97 que comparte este disco/libro.
Comentarios
Tengo una duda. Sigo tu blog desde hace tiempo. Muchos de los álbumes que compartiste años atrás ya los tengo en mi mp3-teca. Estoy notando que los links que estuvieron caídos por mucho tiempo los estas actualizando por otros nuevos. Mi pregunta es si al cargar las carpetas compresas estás usando los archivos que compartiste años atrás o son nuevos, por aquello de la compresión del mp3. Quizás suene un poco obsesivo, pero si estás subiendo archivos de álbumes que ya tengo, con una nueva compresión, pues me gustaría saber, para volver a descargarlos. A la mayoría de las personas les dará igual escuchar un corrido en 128 kbps, pero en mi caso, si puedo escucharlo a 192 o 320 kbps, prefiero infinitamente la 3ra o 2da opción.
Como sabrás, estoy muy agradecido de haber encontrado tu espacio. Realizas un aporte muy importante. No me cansaré de agradecértelo.
Muchas gracias Ana, seguimos en contacto.
ALgunos han sido mejorados por los aportes de Mike, por ejemplo Los Caracuaros, otros son básicamente los mismos con correciones ortográficas, etiquetas de interprétes alguna veces, agregar el cuadernillo, pero no he hecho la anotación de subida de calidad, procuraré hacer la nota de mejor calidad cuando sea el caso para que sepas que te conviene descargarlo.
Por cierto el vol 13 del INAH te conviene redescargarlo, Mike lo puso a mejor calidad... sin cuadernillo pero acabo de conseguir ese cuadernillo, entonces al rato pongo la liga..
Espero que entre todos podamos seguir enriqueciendo nuestras audiotecas de música mexicana y sobre todo que las compartamos para que estas músicas sean conocidas sobre todo por las nuevas generaciones.
Gracias por visitar el blog, seguimos,
Ana
Le estoy muy agradecido por ayudarme a la difusión, a través de su blog, de la música tradicional de los Altos de Jalisco y el Sur de Zacatecas. Espero que todos los que descarguen el fonograma gocen tanto como los rancheros de mi región, entre los que me cuento, de la música y las diversiones. Trabajos como el que usted realiza, difundir y acercar la música tradicional a todos los estratos sociales, es fundamental. De hecho, así adquiere más sentido la labor que los investigadores realizamos.
Un fraterno saludo y a sus órdenes.
Primero lo saludo y permítame comentar que me honra mucho leerlo por aquí.
Me alegra enormemente leer tan amable comentario sobre la labor de este blog.
Este es un blog colectivo aunque de repente no parece, que solo ha sido posible gracias a los aportes de una larga lista de usuarios del blog, el blog empezó en torno a la serie de la Fonoteca, que ha sido fundamental para descubrir la riqueza musical de México, y se ha ampliado un poco para recoger otras grabaciones fuera de catálogo y difíciles de conseguir que gracias a la generosidad de otros, he podido poner aca a disposición y disfrute de todos.
Gracias a estas herramientas hemos tenido acceso al fruto de la dedicación de investigadores como usted y a materiales que contienen lo mejor de la tradición musical de México.
Estamos a sus órdenes. Gracias otra vez.
Que genial saber que hemos sido los anónimos colaboradores, Mike y yo, parte de las malas influencias. Que bueno que encontraste tu vocación y disfrutas tu trabajo.
http://bit.ly/2yItiNG
¡No te arrugues cuero viejo!